Cinco de la mañana.
ya en las esquinas giran los tonos tristes
de los pájaros que escudriñen
por el pan de cada día.
El perro sucio de invierno
les va mordiendo las alas...
con sus ladridos feroces
les va espantando el recuerdo.
Gente, porque les dan la espalda?
si, asfixian sus canciones abismales,
hablan de hornos y cosechas
mujeres de piel oliva aun esperando en la ventana,
noches de tambor en luna llena...
Ilusos!
Nueve de la noche,
la protesta de corazones enjaulados
corre roja por las calles vacías
sordo mundo, que has hecho,
quien se atrevió a engañar a los pájaros?
quien les puso su corona de impedimentos?
ya en las aceras se arrastra la promesa no cumplida
libertad? justicia? igualdad?
llevan en las alas rotas el titulo de ladrones.
Ustedes reclaman: esa no es la realidad, mienten!
Se burlan, se aprovechan, se adueñan de nuestras casas...
Pero piadosos no condenan,
sus besos se les cuelgan de los ojos
perdonando con migajas de olvido
uno por uno a sus nidos de esperanza llegan,
sepultura de ángeles
ay, como duele la resignación.
Mañana sera mejor, fingen.
Vida, vida, permite que a los brazos de sus amadas vuelvan
permite que sus voces recobren la fuerza
cumple la ilusión, enmienda el vuelo
así sea solo en sueños,
hasta las cinco de la mañana.
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